ANEKDOTARIO

Vacaciones y más.

Al final me quedo en Madrid. Mis vacaciones serán light, en ese sentido. Lo único que puede que al final salga es el viaje a Sevilla que tengo pendiente con Pia y alguna que otra escapada por Ávila, Segovia, Guadalajara, o lo que surja.
Cierto es que la capacidad de trasladar mi vida a estas líneas está mermada últimamente, pero es que tampoco hay grandes cosas que contar. La normalidad es patente en cierto modo, aunque monótona y aburrida.
El encasillamiento en ciertas rutinas me limita, y mi ocasional pasividad para buscar los cambios hace que ese encasillamiento del que hablo sea cada vez mayor. Las cosas nuevas es cierto que no vienen por sí solas, hay que buscarlas. Y quizás ahi yo esté cometiendo un error. Dejarme guiar por "lo que surja" supongo que no me llevará a ninguna parte, o al menos no me llevará a donde yo quiera ir. Algo sobrevenido, algo inesperado es lo que siempre uno desea, que del cielo caiga algo que no te esperas ni por lo más remoto. Pero es que ese tipo de cosas no son comunes, y eso es como en el fútbol, cuando te han hecho un centro tú no puedes esperar que la pelota te de en la cabeza para marcar, lo que siempre hay que hacer es ir a por ella para rematar. Eso no quita que un determinado día el balón te de en el culo y así logres el gol de la victoria, pero nunca esperes eso porque perderás el 99% de los partidos.
La pregunta entonces es... ¿qué hacer para cambiar tu estrella? ¿Cómo podemos cambiar o modificar ciertos rumbos que van tomando nuestras vidas?
Yo la verdad que ahora estoy algo bloqueado y no sé la respuesta. Lo que sí tengo claro es que la respuesta existe, y que lo que no puedo hacer es dejar de buscarla.