No me veengas con eeso!
Barcelona mitiquisísísísísísímo!
Jaime, Pedro y Rafa conquistaron lo que viene siendo mayormente Catalunya.
Viernes: un viaje largo que a Pere y a mí se nos hizo corto (y a Jaume más corto aún, el cabrón) dio paso a Godó, tenis, pelotas y molta nena, que nos acogieron enseguida entre sus senos. Tras una sesión múltiple de bolas, el primo de Jaime y sus colegas nos invitaron a una fiestorra de la Universidad de Arquitectura, la cual puso unos temazos remember que hasta el Sr. de las Moscas Nacho hubiese se hubiese sobresaltado. Toda la noche dando botes y conociedo gente extraña que hablaban borrachos en catalán. Entenderles era Misión Imposible 3. Al llegar al peaso hotel de madrugada, una edificante película de ppv nos cautivó y embriagó. Se merecía el Oscar a los mejores gemidos. 2 cervezas abiertas sin probar, una historia para no acabar del Jaume y los extraños sonidos que emitían en la tele, dieron paso a un nuevo día.
Sapatoo: Con una resaca de 3 pares de cojones, sólo quedaba una única solución... Seguir bebiendo. Para alcanzar dicho cometido nos esperaba en su fiat tempra otro ayudante, Luis, o seea te lo diigoo. Sus dotes concuciendo hacían que el menda, Rafel, tuviera serias ganas de dejar su estómago en el salpicadero del coche, pero me contuve (no sé cómo pero lo hice). Eso de "mira, la Plaça Catalunya a la derecha, el edificio de Gaudí a la izquierda, el parque Guell por allá"... conmigo no iba. Estado deplorable. Pero qué gran reconstituyente el zumo de cebada, diooss! 104 euros fue lo que nos cobraron por ingentes cantidades de frescas y alguna que otra tapa, en sólo 3 horas!! Pero ahí simplemente empezaba la noche (a las 18:00 pm!). Acto seguido fuimos a beber + cortiniitas que cayeron por nuestros gaznates sin concesión alguna. Aquí ya se unieron Jaime y primo. Una cena en un Pizza Hut como intermedio, y el colofón fue la zona de martxa al lado de las ya conocidas por niños y mayores Torres Mapfre (no sé el nombre de la zona, la verdad, no fui a Barna de turismo, cojones!). Qué buen roooollo! Música, pivones a más no poder, niñas pequeñas con ganas de marcha (me exculpo de toda culpa, valga la redundancia), algún que otro vomitón, y un montón de charlas con los cumpleañeros que se quedaron en Madrid dieron lugar a uno de los mejores días que recuerdo desde mi ya antigua caída al pozo. Además pude lucir mis mejores artes bailatorias, cosa que sale a relucir en contadas ocasiones. Pero la ocasión merecía hacer de todo. Ah! Algo curioso, de vez en cuando oía por ahí una frase..."Eddie.. no me veeeengas con eeeso". Serán cosas de casa, jajaja!
Diumenge: resaca desastrosa que no me permitió apenas moverme ni articular palabra. Tomaba decisiones extrañas e incoherentes, como la de dejar conducir todo el viaje a Jaime con mi coche (juajua, no se mosquee, Ferre!). Encima van y me preguntan por ahí que si estoy contento con mi nombre!! Qué hijoz de putaa! Pojjclaro que sín. En el viaje mis mareos fueron contínuos, y mis deseos de llegar a la capital crecían por segundos. Llegada al fin, y 2 días para recuperarme.
Viaje inmenso, o seea te lo digoo!
Posted by rafapantomimo at 5 de Mayo 2004 a las 10:56 PM