ANEKDOTARIO

Tiempo de elecciones

Curioso... la capacidad de elección es un bien que escasea cada día más.
Pongamos un ejemplo gráfico para verlo con más claridad.
A los 3 años decides que quieres ser bombero cuando seas mayor, qué bien.
Pero a los 8 quieres ser piloto de carreras, y también está muy bien.
Llegan los 15 y casi en lo único que piensas es dirigir o actuar en cine porno.
Tienes toodo el tiempo del mundo para poder tomar una decisión, incluso cuando ya has metido el pie en la carrera que tanto te costó decidir estudiar. Pero lo que nadie te dice es que esas múltiples opciones con las que te encuentras en la vida se te van cerrando insidiosamente... Que un día te despiertas y ves que eres demasiado perezoso para apagar fuegos, otro día ves que ya eres demasiado viejo como para conducir un Formula1, que... (bueno, lo del cine porno lo dejaremos ahí, jeje). Y así se te van cerrando puertas, puertas que no se te van a volver a abrir por mucho que quieras, porque pasó tu turno, se fue tu tren, y esta vez el tren es de único sentido, no va a volver...
Así que cada día que pasa pienso que cada decisión que tomo, cada elección, tiene una importancia aún mayor si cabe que la anterior. Que tengo menos margen de error y por ende una menor capacidad de reacción. Por eso a veces más nos vale haber elegido bien (llámese trabajo, llámese Universidad, llámese V, X o Y la persona de la que nos enamoramos, etc). Porque lo que no vale son los arrepentimientos.